miércoles, 6 de noviembre de 2019

La clase política



Jorge Roberto Marquez Meruvia*

La siguiente columna se encuentra inspirada en la obra del sociólogo y político italiano Gaetano Mosca. Él pretendía realizar una refutación al marxismo y la idea de la lucha de clases. Tomando como base el trabajo de Saint-Simon, toma la concepción de dos clases que existen dentro de una sociedad: la clase minoritaria dominante y la clase de la mayoría dirigida. Intentó comprobar que durante la historia de la humanidad, siempre existió una minoría dominante. Su obra provocó críticas desde el marxismo las cuales defendían que la diferencia de clases debe tener como base los medios de producción.

El concepto acuñado por Mosca hace referencia a un minúsculo grupo con gente muy activa que es muy consciente de su accionar político y de la que forman gran parte de todos aquellos que dirigen un país.

Para comprender a cabalidad lo anteriormente expuesto, debemos recordar que el 17 de octubre de 2003 se dio el choque de la fuerza irresistible contra el objeto inamovible, donde la fuerza quebró al objeto. A partir de ése momento se configura el actual escenario político boliviano. La fuerza irresistible tenía representación política: Evo Morales con el Movimiento al Socialismo, Felipe Quispe “el Mallku” con el Movimiento Indígena Pachakuti, Jaime Solares como representante de la Central Obrera Boliviana, Hugo San Martín miembro del partido en funciones de gobierno, entre otros que al final tuvieron que dar curso a la renuncia del presidente; al igual, que el objeto inamovible era Gonzalo Sánchez de Lozada y la cúpula del Movimiento Nacionalista Revolucionario.

En noviembre de 2019, tras los sucesos acontecidos después de la fraudulenta elección del 20 de octubre, nos encontramos muy lejos de un escenario similar. El objetivo de la oposición boliviana tiene el mismo fin: la salida de Evo Morales del poder. Sin embargo, plantea diferentes caminos para lograr el objetivo. Prueba de ello, es la carta de renuncia impulsada por los cívicos para Morales Ayma, o el Comité Nacional en Defensa de la Democracia (CONADE) que pide nuevas elecciones sin Carlos Mesa que tiene un apoyo electoral del 36.51%, ni Evo Morales y la escasa respuesta de la recién creada Coordinadora en Defensa de la Democracia que en teoría se encuentra conformada por los partidos políticos y las dos instituciones anteriormente mencionadas.

Tras no haberse llevado con éxito las propuestas llevadas a cabo por los cívicos y el CONADE, es la Coordinadora en Defensa por la Democracia la que debe llevar la batuta en el actual escenario de conflicto, donde la clase política debe hacer la diferencia ante el vacío de líderes que vive la población en su conjunto y donde Carlos Diego de Mesa Gisbert tendría un papel protagónico. Bajo el lema que encontramos en nuestras monedas “la unión es la fuerza”, la oposición se ve en la obligación de trabajar unida y trazar un solo camino para lograr su objetivo. Estamos viviendo momentos críticos en el cual ni la estrategia, ni la táctica se encuentran ordenadas y estamos desgastando la lucha en las calles de miles de millones de personas que defienden las libertades y la democracia. Defensa que ya se ha llevado dos vidas en la ciudad de Montero bajo el cobarde ataque de los seguidores del Movimiento Al Socialismo.

Coordinadora en Defensa de la Democracia

Es momento que la clase política se encuentre a la altura de las circunstancias, que entendamos que la dispersión del objetivo a alcanzar simplemente le da más tiempo al MAS de seguir en el poder. Debemos recordar que Mao mencionaba: “hay un caos absoluto bajo el cielo; la situación es excelente”, pero sin liderazgo el caos, seguirá siendo caos. Necesitamos ser un solo pilar de resistencia, mientras más inconexos nos encontremos no logramos ser la fuerza irresistible que hará tambalear al gobierno.

Es necesario que nuestros políticos desempeñen su mejor labor política para lograr reconquistar las libertades y la democracia que se encuentran secuestradas por el masismo. Bolivia en su conjunto se los exige.     




* Politólogo

lunes, 4 de noviembre de 2019

Apología del periodismo boliviano




Jorge Roberto Marquez Meruvia*

El accionar de distintos canales de televisión sobre las protestas que se realizan en el país van causado malestar en gran parte de la población. Tal es el descontento, que el periodista mexicano Fernando Del Rincón de la cadena CNN es un héroe por el trabajo que realiza. Las entrevistas realizadas por él, tanto al Ing. Villegas y Susana Rivero del Movimiento Al Socialismo demuestran su imparcialidad y el excelente trabajo que desempeña. Esto ha creado un escenario de fuertes críticas contra los periodistas bolivianos, en especial a los de televisión. Sin embargo, no debemos olvidar que la televisión tiene como base lo que Gustave Flaubert denominaba: “hay que pintar bien al mediocre” y que su tarea fundamental es el entretenimiento. Esto último puede explicarnos del porqué gran parte de los conductores de noticias y revistas matinales son simplemente presentadores que gracias a un teleprónter, o un audífono en el oído nos dan a conocer la información.



Debemos considerar que la televisión, tal como lo expone Pierre Bourdieu, su tarea fundamental es dramatizar. Ir tras lo sensacional y espectacular. Pone en pantallas un hecho ordinario y exagera sobre su importancia, ejemplos los podemos ver diariamente, la facilidad con la que salen las noticias de crónica roja, o hechos poco importantes que logran acaparar el interés de todos como la farándula y el sector de los deportes. La pantalla se ha convertido en el nuevo espejo de Narciso, todos sin importancia compiten por salir en pantallas con razón, o sin motivo alguno. Gran parte de la población, por diversas razones, prefiere a la televisión para informase más que a otros medios como ser la radio, o la prensa escrita. No podemos obviar que las pantallas generan un “efecto de realidad”, es decir, que tiene la capacidad de hacernos ver y creer en todo lo nos muestran. Efecto que parece fue roto desde el 21 de octubre por la cobertura de los hechos por los canales más importantes del país. El desencanto llegó al espectador que descubrió que los que se encuentran delante de cámaras en la mayoría de los casos son modelos y personajes con mucha simpatía, pero que conocen muy poco del oficio periodístico.




Es necesario recordar que en 2014 Raúl Peñaranda (periodista) en su libro “Control Remoto” explica de forma clara y precisa el cómo el gobierno crea una red de medios paraestatales para acosar a la prensa independiente. Más allá del estudio realizado por Peñaranda, debemos agregar que es el Estado quien es uno de los mayores clientes de los espacios de propaganda en todos los medios de comunicación. La mordaza a la prensa libre no solamente viene con la creación de medios paraestatales, sino también, en el aspecto económico. Al no existir un mercado libre los medios de comunicación dependen en su gran mayoría de la propaganda gubernamental. Casi de forma silenciosa, el gobierno fue acaparando todos los medios, pero no pudo acabar con la prensa libre. Debemos recordar que tras la derrota sufrida por Evo Morales en el referéndum del 21 de febrero de 2016 el gobierno acuño la frase de “El cártel de la mentira” y mediante un documental intentó sin éxito acabar con su credibilidad.




La prensa libre, sigue trabajando para mostrarnos a cada uno de nosotros lo que ocurre en el país y van contra el discurso gubernamental impuesto en los medios paraestatales. Televisión Universitaria, “Posdata”, “Palabra Abierta”; o desde la radio “De nueve a doce”, “La hora del país”; y la prensa escrita como Página Siete, ANF, El Día, o Los Tiempos, por mencionar algunos siguen trabajando en defensa de las libertades y los abusos del régimen del MAS.




No podemos desmerecer el trabajo de nuestros periodistas, que estando en las condiciones más complicadas y difíciles para llevar a cabo su trabajo y cada día nos mantienen informados. Tampoco, podemos olvidar a aquellos que se encuentran amordazados, pero se dan modos para dar a conocer su descontento y salirse del discurso gubernamental. Los periodistas y su noble labor de llevar como estandarte la libertad.       






* Politólogo

lunes, 28 de octubre de 2019

Cayo Coriolano


Coriolano lidera a los volscos en su lucha contra Roma. Óleo por Raphael Lamar West. 1792

Jorge Roberto Marquez Meruvia*

Cayo Coriolano fue un militar romano que gano numerosas batallas en el siglo V a. C. salvando a la ciudad de Roma del desastre. Se fue convirtiendo en una figura mítica para la población ya que muy pocos lo conocían personalmente. Tras la fama alcanzada decidió en 454 a. C. entrar en política y postularse para el cargo de Cónsul. Para acceder a tan importante cargo la tradición imponía que el candidato de un discurso cuando comenzara su campaña electoral. Coriolano se presentó ante la audiencia y dio a conocer sus heridas y cicatrices en varias batallas acaecidas en más de siete años de luchar por Roma. Aquellas cicatrices, que eran las pruebas de su valor conmovieron hasta las lágrimas a la población que no habían puesto atención, ni escuchado su discurso y el triunfo electoral parecía asegurado.

El día de la elección, Coriolano llegó al foro escoltado por todos los integrantes del Senado y los patricios de la ciudad. Subió a la testera y pronunció su segundo discurso, que iba dirigido a los ciudadanos acaudalados que lo habían acompañado. En tono arrogante e insolente, dio por hecho la victoria por la mayoría de los votos, contaba anécdotas suyas en el campo de batalla, contó algunas bromas irónicas entendidas solamente por los patricios y acusó a sus contendientes de delincuentes. Esta vez la población entera lo escuchó y descubrió que su héroe era un fanfarrón.

Las noticias sobre el segundo discurso de Coriolano corrieron con rapidez por toda Roma, la población se congregó en masa y se aseguró que no fuera electo. Al saber que fue derrotado, Coriolano regresó al campo de batalla y juró vengarse del pueblo que había votado en su contra. Semanas más tarde el Senado se disponía a someter a votación distribuir el alimento gratuitamente entre el pueblo, apareció Coriolano subió al estrado y en su discurso afirmó que la distribución masiva de alimento tendría un efecto negativo para la ciudad (logrando el apoyo del Senado en votación), condenó el concepto de democracia y propuso poner fin a la participación de los tribunos (representantes de los plebeyos) y entregar el gobierno exclusivamente a los patricios.

Al difundirse la noticia de su último discurso, la ira de la plebe no conoció límite alguno. Los tribunos fueron al Senado a exigir que Coriolano compareciera ante ellos, él se negó. En toda Roma se realizaron manifestaciones y tumultos. El Senado, asediado y temeroso de la ira de la plebe, votó por la distribución gratuita de alimentos. Los tribunos quedaron satisfechos, pero el pueblo exigía una disculpa pública del militar. Coriolano se presentó ante el pueblo y comenzó a hablar, primero con un tono medido, pero cuando avanzaba en su discurso se ponía cada vez más agresivo y profería insultos. Cuanto más hablaba, más se enfurecía la plebe. Lo silenciaron a gritos.

Los tribunos condenaron a muerte a Coriolano y ordenaron a los magistrados que el militar sea llevado a lo más alto de la roca Tarpeya y arrojado al vacío. La plebe apoyó la decisión. Empero, los patricios lograron intervenir y la sentencia fue sustituida por el ostracismo de por vida. Cuando el pueblo se enteró que el héroe militar de Roma nunca regresaría a la ciudad, salió a celebrar a las calles.



En Bolivia, comenzando por el presidente, con una seguidilla de ministros, senadores, diputados y simpatizantes al “Proceso de Cambio” nos encontramos rodeados de “Coriolanos”. Ante el fraude electoral realizado con tal de quedarse en el poder, salen a los medios de comunicación con discursos llenos de odio, donde nos insultan a todos los bolivianos que defendemos las libertades y la democracia. No miden sus palabras, pues se encuentran obnubilados por el poder y creen que tienen el control de nuestras vidas. La realidad es distinta a lo que ellos piensan y cada día la población sale a las calles a defender las libertades y para terminar con los abusos del gobierno de Evo Morales y el Movimiento Al Socialismo.      





* Politólogo

jueves, 24 de octubre de 2019

El valor del sacrificio




Jorge Roberto Marquez Meruvia*

El 13 de junio de 1522 fallecía Pier Soderini, quien fuera “gonfalioniere a vita” de Florencia. Nicolás Maquiavelo fue su Segundo Canciller de la República y le ofrendo unos versos:

«La noche que murió Pier Soderini,
el alma fue a la boca del infierno;
grito Plutón: “¿qué infierno?, ánima tonta,
ve arriba al Limbo con los otros niños”»



Fue así como Maquiavelo le reprochaba a Soderini su extrema inocencia, su incapacidad de realizar el daño que hubiese sido necesario hacer para salvar la República de Florencia. Según su Segundo Canciller, Pier Soderini “creía superar con su paciencia y bondad aquel apetito que tenían los hijos de Bruto [los partidarios de los Médicis] por volver a vivir bajo otro gobierno, y se equivocó. Y aunque aquél, por su prudencia, conociese esta necesidad, y aunque la suerte y la ambición de quienes se le oponían le diese ocasión de eliminarlos, sin embargo nunca se decidió a hacerlo. Porque, además de creer que con la paciencia y con la bondad podía extinguir los malos humores, y que premiando a alguien eliminaría su enemistad, consideraba (y muchas veces lo sostuvo entre sus amigos) que para chocar gallardamente contra las oposiciones y batir a sus adversarios habría debido asumir una extraordinaria autoridad y romper con las leyes de la cívica igualdad […]. Pero le engaño la primera opinión, al desconocer que la maldad no es vencida por el tiempo ni la aplaca obsequio alguno”. Su accionar, por no haber querido tomar medidas extraordinarias contra los enemigos de la República, fue catastrófica y Soderini perdió “junto con su patria, su jerarquía y su reputación”. La República de Florencia había caído.



Un escenario similar al descrito por Maquiavelo paso en Bolivia, pero el actor del momento entendió lo que hubiera recomendado nuestro pensador florentino: el de realizar el daño necesario para salvar la República. El 29 de agosto de 1985 a las seis de la tarde, el presidente Víctor Paz Estenssoro le decía al país tras promulgar el D.S. 21060: “O tenemos el valor moral, con su secuela de sacrificios, o sencillamente, con gran dolor para todos, Bolivia se nos muere”. La crisis económica dejada por la administración Siles Zuazo necesitaba de una rápida respuesta gubernamental y esta no podía ser de carácter cosmético, ni del gusto de las mayorías populares. Era un momento crítico que necesitaba de medidas extraordinarias.



¿Estamos cerca de un momento crítico? La respuesta, indudablemente es sí. Tras el acto electoral realizado el 20 de octubre y el fraude en proceso a cargo del Tribunal Supremo Electoral, los bolivianos estamos en un momento crítico y extraordinario de nuestra historia. ¿Cómo llegamos hasta aquí? Por el exceso de inocencia, paciencia y bondad, al pensar que el Movimiento Al Socialismo al igual que gran parte de los bolivianos tiene vocación democrática. Fuimos muy ingenuos al pensar que Morales Ayma iba a irse del poder por mandato de las urnas. No fue capaz de respetar el referéndum del 21 de febrero de 2016, ni la constitución que junto con su partido crearon y que el Congreso de aquel tiempo le dio luz verde con candidez.



Es momento del sacrificio, pero no en el martirio, el dolor, o el sufrimiento, sino, en el de la persistencia. El tomar las calles va más allá de pedir que los resultados de la elección sean transparentes y que vayamos a una segunda vuelta. Salimos a las calles a defender la libertad de cada uno de nosotros, libertad que desde la llegada del MAS es restringida poco a poco con todos los recursos del Estado. Nos han silenciado a base del miedo, de la coacción y han tenido la capacidad de hacernos creer que el quehacer político es de lo más deplorable, con esto último fueron capaces de desaparecer a los opositores del escenario político.

Luchemos por la libertad, sin olvidar que “la maldad no es vencida por el tiempo”.   




* Politólogo

martes, 8 de octubre de 2019

¡Federalismo ya!




Jorge Roberto Marquez Meruvia*

Hablar de federalismo en Bolivia no es algo novedoso, es un hecho continuo en nuestra historia. El primer ideólogo del federalismo en el país es el cochabambino Lucas Mendoza de la Tapia, quien en la Convención de 1871 propone cambiar el Estado unitario por uno federal. Para Mendoza de la Tapia el centralismo (unitarismo) era: “la corrupción institucional y el origen de las tiranías, como de las revoluciones”. La propuesta de los representantes de Cochabamba fue desechada por 32 votos contra 20. Sin embargo, a la cabeza de Nataniel Aguirre y otros ilustres de la época, crearon el periódico “El Federalista”.

La fuerza del ideal federal llega a la capital oriental el 25 de diciembre de 1876 y mediante cabildo se declara la “Junta Superior del Estado Federativo Oriental” donde jugó un papel muy importante Andrés Ibáñez, quien fuera la cabeza del “Movimiento Igualitario”. La federación reconocía el gobierno del Presidente Hilarión Daza e intentaba establecer un ordenamiento político paralelo al centralista y unitario. Ibáñez es posteriormente capturado, siendo fusilado el 1 de mayo de 1877.

La guerra federal fue ocasionada por la “Ley Radicatoria” firmada por el Presidente Severo Fernández Alonso y la fuerte disputa entre los conservadores y liberales. Los primeros afincados fuertemente en Sucre y los segundos en La Paz, también, fue un conflicto económico donde los comerciantes del norte tenían fuertes conexiones con el mercado peruano y la explotación de minas de oro que eran más gravitantes que el mal momento que pasaba la minería de la plata. El resultado fue la victoria de los militantes del partido liberal a la cabeza de José Manuel Pando, instalando la “Junta Federal de Gobierno”. La paradoja es que la asamblea que le entrega la presidencia a Pando, deja de lado el debate federal y adopta la constitución de 1880 que es unitaria, centralista.

Dando un salto en el tiempo, en la década de los 90’s del siglo XX la “Ley de Participación Popular” tenía como objetivo el descentralizar el Estado y la creación de un centenar de municipios. El proceso autonómico iniciado en 2004 podríamos considerarla como una evolución abrupta de la “Participación Popular”. Ante el fracaso de la autonomía al ser absorbido por el gobierno central y no dar soluciones ante las necesidades socio-económicas en Potosí el año 2010 resurgió el grito de federalismo.

El Cabildo del 4 de octubre en Santa Cruz no solamente vuelve a tomar la bandera del federalismo, sino, que le agrega otros dos pilares: democracia y libertad. Ante el autoritarismo del gobierno central y el desconocimiento de los resultados del referéndum del 21 de febrero, la consigna es clara: sacar al tirano del poder. Una vez fuera la oligarquía centralista azul, vendrá un gobierno de transición donde vamos recuperar la democracia y las libertades que son la base del federalismo.

¿Por qué el federalismo? Porque el federalismo es la unión en realidades distintas, porque es integrador y plural, porque responde a una necesidad de la bolivianidad y es el estar juntos con un fin común y de resguardo de la identidad de cada una de sus regiones y porque es el pilar para la construcción de instituciones comunes para fortalecimiento mutuo y de respeto en lo que los distingue. El federalismo es autogobierno y un gobierno compartido entre todas las partes de la federación. Por tal motivo los bolivianos seguimos gritando ¡federalismo ya! 


* Politólogo

martes, 10 de septiembre de 2019

Breve análisis sobre las encuestas de intención de voto de CIESMORI




Jorge Roberto Marquez Meruvia[1]

Los datos utilizados se encuentran en la siguiente página web: http://www.unitel.tv/asi-decidimos-2019/ (en fecha 10 de septiembre de 2019). A continuación vamos a realizar un pequeño análisis de acuerdo a la información presentada de intención de voto.

El eje central (Santa Cruz, La Paz y Cochabamba) congrega la mayor cantidad de habilitados en el padrón electoral nacional para las próximas elecciones generales del 20 de octubre. El eje tiene el mayor impacto electoral que no podemos negar independientemente de nuestro apego y simpatía por cualquiera de las 9 candidaturas en competencia. Ganar en éstos tres departamentos da la posibilidad a cualquiera de los candidatos de acceder a Palacio y hacerse con la silla presidencial. Un dato que no podemos dejar de lado es el margen de error de ± 2,07%.



En el departamento de Cochabamba la diferencia del primero y el segundo es de 19%; en La Paz es del 17%; y en Santa Cruz existe un empate. Sin embargo, es el Movimiento Al Socialismo (MAS) que lidera en dos departamentos (La Paz y Cochabamba) y empata en Santa Cruz con Bolivia Dice No (BdN) el primer lugar. Comunidad Ciudadana se encuentra muy relegado en Santa Cruz ocupando un tercer lugar con el 16% por debajo de 13% de sus dos principales competidores, tanto en La Paz al igual que en Cochabamba ocupa el segundo lugar, pero se encuentra a más de 10% de diferencia con su principal competidor.



La diferencia por más del 10% entre los dos principales candidatos por la presidencia se da en los siguientes departamentos: Oruro 16%, Tarija 17% y Pando 22%. Tanto en Oruro y Pando Evo Morales es primero; Carlos Mesa ocupa el primer lugar y con una amplia ventaja en Tarija. Oscar Ortiz se encuentra muy relegado




Por debajo del 10% encontramos a: Beni 3%, Potosí 6% y Chuquisaca 7%. En el caso del departamento del Beni el margen de error puede darnos un empate entre el primero y el segundo, que son el MAS y BdN (Evo Morales y Oscar Ortiz). Comunidad Ciudadana se encuentra en el tercer lugar, Mesa se encuentra a 11% de Morales y a 8% de Ortiz.



Los resultados nos muestran que los incendios en parte de la Chiquitanía y Amazonia bolivianas tienen un impacto mínimo en la intención de voto. La muestra de la encuesta se levanta entre el 20 de agosto y 4 de septiembre, que son los momentos críticos del siniestro. Que no nos llame la atención que en posteriores encuestas los resultados sean similares. El gobierno ha acaparado los medios de comunicación con propaganda y dado a conocer el “Plan Tajibo” a diferencia de la oposición han sabido posicionarse sobre el tema. Bolivia Dice No y Comunidad Ciudadana simplemente van lanzando culpas y encontrando responsables.

El Movimiento Al Socialismo tiene una gran ventaja, una base aún abundante de voto duro y gran parte de los mensajes gubernamentales es para fidelizarlos, pero también cuenta con llegada a lo popular. Esto último, puede significar el punto de quiebre de la elección, debido a que Comunidad Ciudadana y Bolivia Dice No, no cuentan, o en el peor de los casos no saben cómo llegar a esta porción del electorado. Quedan alrededor de 40 días antes de la elección donde los partidos y sus equipos de campaña tendrán que trabajar para posicionarse mejor tanto en el eje central y tratar de acortar distancia entre los dos oponentes en varios departamentos en caso de que queramos ir a una segunda vuelta.
    





[1] Politólogo

miércoles, 31 de julio de 2019

La coacción del “voto útil”





Jorge Roberto Marquez Meruvia[*]


Parece que los bolivianos olvidamos sucesos que marcan nuestra historia, uno de ellos que desde que recuperamos la democracia el voto siempre fue disperso. Claro ejemplo de esto fue el Congreso que hizo presidente a Walter Guevara Arze, Lidia Gueiler Tejada y Hernán Siles Zuazo. Siles juraría a la primera magistratura del Estado el 10 de octubre de 1982 ante el Parlamento conformado en 1980. La última presidencia de Víctor Paz Estenssoro también veríamos la dispersión del voto y un poder legislativo dividido, ante la crisis que vivía el país Hugo Banzer Suárez firma con Paz Estenssoro el “Pacto por la Democracia”. Posiblemente, el caso más emblemático es la llegada a la presidencia de Jaime Paz Zamora, el tercero ocuparía la presidencia con el apoyo de Acción Democrática Nacionalista (Banzer).

Por tales razones, en la elección del 20 de octubre existirán 9 candidaturas, ya que la dispersión es parte de nuestra cultura política y los llamados a la unidad son infructuosos. El voto útil intenta ser direccionado al candidato que en teoría tiene probabilidades de ganar, sin embargo, apenas comenzamos el periodo de campaña electoral. El simple hecho de decir que el voto sirve en caso de que se vote por el candidato “Z” y no por el candidato “X” es coacción psicológica de la más perversa que va contra la libertad de elección del individuo. Somos libres en elegir y muchos de nosotros votaremos por la opción que creamos conveniente. No debemos olvidar que la democracia, aquella que decimos defender es competencia y pluralidad. Que no nos gane la campaña del miedo y que elijamos a los candidatos que nos dicta nuestra consciencia.  




[*] Politólogo, Director de Gaceta Hoy

lunes, 25 de febrero de 2019

Ambigüedad en política




Jorge Roberto Marquez Meruvia[*]

Luis H. Antezana en un breve ensayo titulado “Sistema y proceso ideológico en Bolivia” menciona que existe una episteme ideológica que tiene como base el “nacionalismo revolucionario”, siendo este el operador ideológico el cual es oscilante como un péndulo en el espectro político comunicando sus extremos: el nacionalismo (derecha) y lo revolucionario (izquierda). Comienza su gestación en el periodo de la Guerra del Chaco y se convierte en un discurso hegemónico a partir de la revolución de 1952. A partir de la victoria del MNR en abril el “nacionalismo revolucionario” es el camino hacia el centro de poder. En el aspecto discursivo nos habla de la alianza de clases, donde todos se encuentran incluidos, pero en la realidad, simplemente instrumentaliza los intereses de las clases dominantes. Los obreros responden al ala izquierda, mientras que el campesinado es el freno cuantitativo de estos primeros y al ser mayoría demuestran su fuerza a través del voto.

Tal escenario descrito por Antezana todavía parece encontrarse vigente y por el momento no existen nuevas condiciones ideológicas, esto no quiere decir que en un futuro sean producidas. A continuación, vamos a describir las posiciones dentro el espectro político de los principales contendientes a las elecciones generales de octubre. Debemos recordar que como nos encontramos en un período de campaña bastante largo los principales competidores por el momento se moverán por todo el espectro que recorre el péndulo ideológico.

Comunidad Ciudadana y el Movimiento Al Socialismo se encuentran en una cruzada de largo aliento, donde ambas fuerzas políticas van a intentar ampliar su base de voto duro. El MAS busca más sectores fieles como la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales Originarios de Bolivia bajo el control de los cocaleros del Chapare; en contraposición la alianza Comunidad Ciudadana cerró una alianza con Bolivia Somos Todos. Ambos, lo hacen para obtener la mayor cantidad de votos en el área rural. Aunque por el momento no cuentan con un proyecto, los dos van recorriendo el espectro político recogiendo todo lo que creen conveniente y necesario, aprovechan así el movimiento del péndulo para tratar de adherir la mayor cantidad de apoyo posible más allá de los votos duros con los que cuentan. Al comenzar la recta final de la campaña electoral es muy posible que estos contendientes se encuentren en una intersección dentro del espectro político, donde nos den a conocer una propuesta similar con algunos matices (centro de poder). La única diferencia significativa de ellos, sería de orden estético. Como nos encontramos a las puertas de un escenario cada vez más polarizado, tanto Comunidad Ciudadana y el MAS tienen la posibilidad, ya sea de llegar, o quedarse en palacio con una victoria en primera vuelta con el porcentaje justo y necesario.

Los Demócratas van manejando de manera interesante el discurso del desarrollo cruceño intentando sin fortuna abandonar el péndulo ideológico. Olvidan generosamente que el desarrollo del cual hablan se debe a los fondos destinados de la COMIBOL al oriente boliviano en la revolución movimientista, el 11% de las regalías para la región y al plan Bohan creado antes de los 50’s del siglo XX. Edwin Rodríguez, el candidato a vicepresidente es el nexo con el área rural. No tienen como intención ganar las elecciones, por tal motivo va Óscar Ortiz de candidato y no el jefe de partido Rubén Costas (quien posiblemente vaya a terciar en la contienda municipal de Santa Cruz de la Sierra). Su objetivo es tratar de ingresar a la Asamblea Legislativa Plurinacional la mayor cantidad de curules posible. Saben que son un partido regional que tiene la esperanza de convertirse en un referente nacional. Por otra parte, Unión Cívica Solidaridad al verse en la obligación de participar opta por intentar posicionarse sin éxito a la derecha con un discurso conservador y mojigato, para tal efecto es Humberto Peinado, un pastor evangélico quien va por la vicepresidencia y Víctor Hugo Cárdenas es el puente con el campesinado.

La clase política va dejando de lado a lo que podemos denominar lo neo-nacional popular (nacional comercial), ya que dentro del nacionalismo revolucionario el campesinado se encuentra estancado e inamovible. El peso de la realidad nos demuestra lo contrario, ya que la migración entre campo y ciudad fueron gestando a la burguesía chola. Tal burguesía puede dividirse desde la economía de subsistencia, hasta el mover mercancías por todo el territorio boliviano y que se encuentra en contacto con el mundo. Tanto para el oficialismo como para la oposición son vistos con desdén, para el primero, simplemente sirven para lo ritual y folclórico; para los segundos, no gozan con el capital simbólico necesario.

Lo neo-nacional popular es quien en las próximas elecciones de octubre y 2025 definirá quienes llegaran a palacio y que más allá del capital económico que atesoran, buscan el capital simbólico necesario para llegar a posiciones importantes dentro del Estado. Es momento de ver a esa Bolivia que ignoramos por mitos y prejuicios.   



   

       


[*] Politólogo, Director de Gaceta Hoy

miércoles, 30 de enero de 2019

Lecciones primarias




Jorge Roberto Marquez Meruvia[*]

Las elecciones primarias dejaron en Bolivia diversas enseñanzas, entre ellas la definición máxima de Max Weber en “Economía y sociedad” sobre los partidos políticos: “una asociación [...] dirigida a un fin deliberado, ya sea éste 'objetivo' como la realización de un programa que tiene finalidades materiales o ideales, sea 'personal', es decir tendiente a obtener beneficios, poder y honor para los jefes y seguidores, o si no tendiente a todos estos fines al mismo tiempo”. Weber trata de explicar la naturaleza de los partidos políticos, de su accionar y su característica de ser una entidad de asociación. Algo que como sociedad hemos llegado satanizar y los consideramos despreciables junto con el quehacer político, olvidando que en una democracia los partidos políticos son muy importantes, ya que son quienes compiten por la toma de poder.

“La clase política”, según Gaetano Mosca es relevante, debido que son los políticos los que crean las reglas del juego dentro de una sociedad. Son estos, quienes entregan, o quitan libertades a los ciudadanos, a los individuos. La clase política es una minoría dominante, la cual se reproduce y renueva. Es bueno recordar que la decisión de participar en política es individual y que es una profesión. Cabe aclarar que cuando Mosca se refiere a la clase política, no lo hace bajo ideas marxistas y la lucha de clases, sino, sobre las élites políticas. Élites que en el caso boliviano, van ganado notoriedad, cada día son más importantes y pueden destruir los perjuicios de los cuales se cuelgan activistas y plataformas.

La realidad es diferente a nuestros deseos y esto acaba de descubrirlo el gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS) y posiblemente se deba a su carácter revolucionario algo atolondrando. Para que los miembros del oficialismo no se sientan especiales, Gustav Le Bon explica magistralmente su accionar en “Psicología de las masas”: “Las masas latinoamericanas se preocupan solamente de la independencia colectiva de la secta a la cual pertenecen y la característica típica de su concepción de independencia es la necesidad que experimentan de imponer sus creencias, de un modo inmediato y violento, a aquellos que están en desacuerdo.” Las primarias fueron impuestas por el oficialismo, no podemos negar que es más que interesante democratizar los partidos, pero es un sinsentido votar por un único binomio. Para el MAS el 27 de enero era una excusa para demostrar su fuerza partidaria contra los partidos de oposición; sin embargo, al ser el voto de carácter voluntario y con un simple voto se lograba la habilitación de las elecciones generales de octubre el porcentaje de militancia que participó en las primarias no es un dato significativo, ya que no representan la intención de voto de las elecciones generales. Más allá del bajo porcentaje de participación de la militancia del partido gobernante, las primarias pueden darnos una perspectiva del trabajo de todos los partidos políticos, saber por ejemplo cuales son los errores que deben corregir y estar preparados para el control electoral de las elecciones de octubre.

A partir del 27 de enero, los partidos políticos tendrán un arduo trabajo rumbo al mes de julio, ya que el séptimo mes del año deberán entregar listas de candidatos para el parlamento y los partidos buscaran y crearan líderes para que compitan por estos escaños. Asimismo, debemos mencionar que los activistas y plataformas tendrán el mismo trabajo, ya que esperaran la invitación de los candidatos a la presidencia y estarán compitiendo para lograr sus objetivos.

Los bolivianos estamos dando los pasos necesarios para volver a colocar a la política en el sitial que se meceré y de volver a descubrir de lo necesaria e importante que es para el futuro de todos nosotros.



[*] Politólogo, Director de Gaceta Hoy

jueves, 24 de enero de 2019

Apuntes sobre el Gabinete Ministerial




Jorge Roberto Marquez Meruvia[*]

El nuevo gabinete ministerial para la gestión 2019 del presidente Evo Morales tiene retos y desafíos los cuales deben sortear sin dificultades, debido a que nos encontramos en un año electoral. Observamos, el regreso de autoridades a cargos importantes, ratificaciones y nuevas incorporaciones. A continuación, mencionaremos a los ministros que se verán obligados a ser los más sobresalientes del flamante gabinete.

El regreso de Juan Ramón Quintana al Ministerio de la Presidencia, nos muestra que es un gran operador político y uno de los de línea dura dentro el MAS. Puede considerárselo como un revolucionario y posiblemente vaya a capitanear la campaña electoral. Quintana tiene un liderazgo fuerte y no es dubitativo cuando va tras un objetivo. Desde presidencia podrá tener control y mucho margen de acción en el territorio nacional.

Luis Arce Catacora vuelve a tomar las riendas de la cartera de economía, desde la cual tendrá como retos: el demostrar la sustentabilidad del modelo social comunitario productivo en un año crítico para la economía; entre los desafíos, compartirá la responsabilidad con Luis Alberto Sánchez de hidrocarburos las negociaciones sobre un nuevo contrato de gas al Brasil. Ambos tendrán que trabajar contra el tiempo y tener todo previsto para mayo. Independientemente, de las megareservas de gas anunciadas, Bolivia puede quedarse sin mercados. El megacampo Libra y Vaca Muerta en Brasil y Argentina respectivamente serán la gran competencia para el sector de hidrocarburos boliviano. En caso de que vayamos a sufrir un escenario negativo, no sería descabellado ver a Chile como un potencial comprador. Esto último, demostraría que el modelo económico no es exitoso y que en 13 años de gestión no modificamos el sector exportador de materias primas tan común en 194 años de vida republicana.

La otrora presidente de la Cámara Baja y Alta, Gabriela Montaño tiene una responsabilidad muy difícil al ocupar el Ministerio de Salud. El trabajo que tendrá que desempeñar no será nada sencillo, ya no goza de un apabullante rodillo parlamentario para imponer los deseos gubernamentales, entre ellos el Seguro Universal de Salud, que será el primer escollo que tendrá que sortear. No lo tiene nada fácil, el Colegio Médico desde el año pasado tiene como demostrar de manera técnica la imposibilidad de ser viable el SUS. Es posible que Carlos Romero (Gobierno), nuevamente será el encargo de llegar a buen puerto una negociación con el sector de los galenos.

Nélida Sifuentes será la encargada de Desarrollo Productivo, ella según dio a conocer a varios medios de información se encuentra preparada para el cargo y para trabajar en serio, ya que sus funciones en el Senado los calificó de suaves. Seguramente, por la facilidad de funciones es que ahora la Cámara Alta es presidida por Adriana Salvatierra. Para los parlamentarios oficialistas el trabajo en ambas cámaras es similar a un paseo por el bosque.

José Manuel Canelas será el encargado de que la relación de la prensa y el gobierno deje de ser turbulenta. El nuevo ministro de comunicación es hábil de palabra y un interesante cortesano, es carismático y diplomático. Parece el hombre indicado para el cargo.

Para concluir, Milton Gómez regresa al Ministerio de Trabajo y tendrá un trabajo complicado con diversos sectores sindicales y la jubilación obligatoria; no podemos olvidar que el mejor posicionado en el gabinete es el ministro de justicia Héctor Arce Zaconeta.

El presidente Evo Morales no solamente debe confiar en su nuevo gabinete, sino también, debe tener fe en cada uno de sus ministros, ya que estamos en periodo electoral y es tiempo de milagros. También, es un tiempo de pugnas internas por el poder y el gabinete es un ejemplo de esto último.  


[*] Politólogo, Director de Gaceta Hoy